Un día te levantas y te da por poner el pie derecho en el suelo.
A mi siempre me da por poner los dos a la vez. Nunca sabes cuándo puedes tener un exceso de buena suerte, y necesitar un poquito de ese pie izquierdo. ¿Un exceso de buena suerte? Sí, te explico.
¿Conocéis esa sensación de que nada puede salir mejor, y de repente pasa algo que lo mejora aún mas? ¿No? Entonces es porque sois guardianes de la mala suerte. Yo si veo una escalera, paso por debajo, porque a todos nos gusta que nos rocen las piernas...incluso a las escaleras. Si veo un gato negro, lo envidio por tener la suerte de ser dueño de 7 vidas...y yo solo de una. Yo no creo en mas supersticiones que las que me dicen tus caderas. Y así me va, con exceso de buena suerte. Porque hay que tener muy mala suerte para mirarte y no ahogarse en el mar que escondes en la mirada. Y hay que tener muy buena suerte para ser rescatado por el salvavidas que escondes en la comisura. ¿A cuantos hombres habrás ahogado con tu mirada?
De esto que un día te levantas, y pones los dos pies a la vez en el suelo. De esto que tientas a la buena y a la mala suerte, hasta tal punto que me encuentro contigo. De esto que me ahogo en ti. Creo que aún no voy a necesitar el pié izquierdo, ni tu salvavidas. Aún puedo aguantar un poco mas la respiración hasta que vengas a ahogarte conmigo. No necesitamos salvavidas, deja la comisura, no la vas a necesitar.
De esto que me levanto un día y te pongo a ti en el suelo.Sobredosis.De buena suerte.
A mi siempre me da por poner los dos a la vez. Nunca sabes cuándo puedes tener un exceso de buena suerte, y necesitar un poquito de ese pie izquierdo. ¿Un exceso de buena suerte? Sí, te explico.
¿Conocéis esa sensación de que nada puede salir mejor, y de repente pasa algo que lo mejora aún mas? ¿No? Entonces es porque sois guardianes de la mala suerte. Yo si veo una escalera, paso por debajo, porque a todos nos gusta que nos rocen las piernas...incluso a las escaleras. Si veo un gato negro, lo envidio por tener la suerte de ser dueño de 7 vidas...y yo solo de una. Yo no creo en mas supersticiones que las que me dicen tus caderas. Y así me va, con exceso de buena suerte. Porque hay que tener muy mala suerte para mirarte y no ahogarse en el mar que escondes en la mirada. Y hay que tener muy buena suerte para ser rescatado por el salvavidas que escondes en la comisura. ¿A cuantos hombres habrás ahogado con tu mirada?
De esto que un día te levantas, y pones los dos pies a la vez en el suelo. De esto que tientas a la buena y a la mala suerte, hasta tal punto que me encuentro contigo. De esto que me ahogo en ti. Creo que aún no voy a necesitar el pié izquierdo, ni tu salvavidas. Aún puedo aguantar un poco mas la respiración hasta que vengas a ahogarte conmigo. No necesitamos salvavidas, deja la comisura, no la vas a necesitar.
De esto que me levanto un día y te pongo a ti en el suelo.Sobredosis.De buena suerte.
